sábado, 30 de julio de 2011

Regantes y políticos alicantinos sellan su unión contra la supresión de 18.000 hectáreas de regadío


Representantes de las 39 poblaciones afectadas, Consell y Diputación firman un manifiesto para que no se realice la revisión del Plan de Cuenca del Júcar
J. AGUADO.CRUCES/INFORMACIÓN

Representantes de la política y la agricultura de Alicante sellaron ayer su unión en contra de la revisión del Plan Hidrológico del Júcar, que prevé la eliminación de 18.0000 hectáreas de regadío en el Vinalopó y l'Alacantí. El llamado "Pacto de Monforte", firmado en la localidad del Medio Vinalopó, recibió el apoyo de los dos partidos mayoritarios de la provincia, PP y PSOE, con una amplia representación de todos los alcaldes de las 39 poblaciones afectadas -también de Valencia y Albacete-, representantes del Consell y la Diputación de Alicante.
El "todos a una" que solicitó la Junta de Usuarios del Vinalopó, l'Alacantí y el Consorcio de Agua de la Marina Baja esta semana consiguió un respaldo multitudinario ante una situación que podría suponer la pérdida de cerca de 35.000 puestos de trabajo y unas pérdidas anuales de 220 millones de euros en el sector, como demuestra un estudio reciente elaborado por la misma Junta en colaboración con la Universidad de Alicante, al que se hizo constante referencia en el encuentro de ayer.
El manifiesto firmado ayer contempla la remisión de los acuerdos adoptados al Gobierno, al presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar y a todos los miembros del Consejo del Agua de la Cuenca, instándoles a apoyar las iniciativas en defensa de los regantes alicantinos.

Culpables
La consigna lanzada por todos los ponentes en la reunión de ayer fue la misma. La Comunidad Valenciana ha hecho sus deberes en política hídrica, pero aún así se siguen poniendo trabas al desarrollo de la agricultura con la supresión de las 18.000 hectáreas de regadío.
La consellera de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua, Maritina Hernández, acusó al Gobierno de querer esconder el déficit hídrico valenciano con este último movimiento, "poniendo así en tela de juicio los aportes externos", en clara referencia a los tan demandados trasvases. La consellera volvió a hacer un llamamiento a la llegada de agua de calidad y a precio competitivo para los agricultores valencianos y defendió la "cultura del ahorro" de la Comunidad, de la que dijo, tiene el mayor porcentaje de riego avanzado de Europa, basado en la sostenibilidad.
Más explícito fue Benjamín Aparicio, presidente de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana (Fecoreva), quien afirmó que "nos quitaron el agua con alevosía -refiriéndose al trasvase del Ebro- y ahora nos quieren quitar hectáreas". Aparicio rechazó el uso de agua desalada, "que solo es buena de forma puntual", y aseguró que el

Sentido común
El Presidente de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, l'Alacanti? y Consorcio de Aguas de la Marina Baja, Andre?s Marti?nez, apeló en su intervención "a recuperar el sentido común", y aseguró que además de la pérdida de empleo y facturación en el sector agrícola, la supresión de las hectáreas de regadío acabarán con una necesaria "mancha verde".
Por su parte, la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, recordó que gran parte de economía de Alicante depende de la agricultura y, por supuesto, del agua; y llamó a todos los presentes a "alzar la voz por una causa justa".

En el Medio Vinalopó
La supresión de la superficie de regadío contemplada en a revisión del Plan Hidrológico del Júcar es especialmente dramática para la comarca del Medio Vinalopó, que perdería el 50 por ciento de su superficie de regadío. En poblaciones como la anfitriona, Monforte del Cid, cuya economía está fuertemente basada en el cultivo de uva de mesa, las consecuencias serían catastróficas, como aseguró la alcaldesa, Antonia Cervera.

El papel socialista
La máxima responsable de los socialistas alicantinos ya lo había avisado: habría consenso en la reivindicación. Ana Barceló, ofreció el apoyo del PSPV-PSOE como interlocutores ante el Gobierno y la Confederación Hidrográfica del Júcar "para que se escuchen todas las alegaciones presentadas".

Recuerdos a García Antón y Camps
A pesar de que la convocatoria de ayer en Monforte del Cid partía sin signo político, la predominancia del Partido Popular en la Comunidad Valenciana se hizo notar. Además de la amplia representación de alcaldes del PP en una provincia dominada por el azul, la presencia de la consellera de Agricultura, Pesca, Alimentación y Agua, Maritina Hernández, y otros dos pesos pesados del Consell, Cotino y Císcar, decantó la balanza hacia los méritos del partido. En la recta final de su intervención, Hernández quiso tener un momento de recuerdo para el fallecido José Ramón García Antón, quien ocupaba el área de Agua del Consell en el momento de su muerte. La consellera le definió como el "gran ideólogo que planificó todas las soluciones técnicas ante la problemática de la escasez de agua", lo que provocó una primera tanta de aplausos entre el público. No fue el único recuerdo. Hernández no quiso dejar pasar la oportunidad de nombrar a Francisco Camps, expresidente de la Generalitat Valenciana, del que dijo, "introdujo en la agenda política del Consell los problemas del agua en la Comunidad Valenciana", consiguiendo provocar también los
Por su parte, la minoría socialista que se encontraba en el Auditorio de Monforte del Cid, no quiso dejar pasar la oportunidad de reivindicar a uno de los suyos. La secretaria general del PSPV-PSOE en Alicante, Ana Barceló, defendió el papel del aspense Miguel Iborra, "un luchador por todos los temas del agua y trabajó codo con codo con los agricultores". j. a.